RUINAS DE LA CAPILLA DE LOS BENAVIDES

 RUINAS DE LA CAPILLA DE LOS BENAVIDES (BAEZA).

Escrito por Miguel Milla Valdivia. 

Mosaico hecho a partir de diferentes fotografías del monasterio de San Francisco y las ruinas de la Capilla de los Benavides de Baeza. 

Nos encontramos en la ciudad patrimonio de la humanidad, junto con Úbeda, de Baeza. Ambas ciudades jiennenses con un increíble patrimonio renacentista sobre todo (aunque también íbero, romano, andalusí, románico, gótico...). Y aquí se encuentra la que muchos consideran la obra cumbre (aunque discrepo) del monstruo de la arquitectura que fue Andrés de Vandelvira, considerado como uno de los tres ases del Renacimiento español.

Restos del acueducto de Alcaraz, posiblemente la primera gran obra en la que trabajó Andrés de Vandelvira. Sin embargo no como arquitecto si no como cantero. 

Nacido en 1505 en la villa albaceteña de Alcaraz, Vandelvira fue arquitecto y cantero que desarrolló casi toda su obra entre las provincias de Albacete y, sobre todo, Jaén, aunque también en Cuenca, Guadix, Málaga o Sevilla. La familia nobiliaria de Benavides quiso construir una capilla funeraria privada y para ello en 1538 firmó un acuerdo con la orden manástica de San Francisco para que se hiciera cargo de ella una vez construida. Quisieron hacerla a imitación de la que en Úbeda se construyó el secretario de Carlos I Francisco de los Cobos, la maravillosa Sacra Capilla del Salvador del Mundo. 

Exterior de la Sacra Capilla del Salvador del Mundo, Úbeda. 

Parte del interior de la Sacra Capilla del Salvador del Mundo, Úbeda. 

Aquí también trabajó Vandelvira aunque no pudo desarrollar todo su potencial puesto que hubo de trabajar sobre el proyecto de Diego de Siloé (otro de los ases). Lo que sí fue obra suya fue la sacristía, una de las obras maestras del Renacimiento español a la que dedicaré un post en cuanto me sea posible. 

Puerta de entrada a la sacristía de la Sacra Capilla del Salvador del Mundo, Úbeda. 

Interior de la sacristía de la Sacra Capilla del Salvador del Mundo, Úbeda. Obra de Andrés de Vandelvira. 

Sin embargo en la capilla de los Benavides sí pudo hacerlo puesto que fue completamente obra suya.

Arcos de sustentación del presbiterio de la Capilla de los Benavides, Baeza. 

Por desgracia quedó muy deteriorada por un terremoto en el siglo XIX seguido de posteriores temporales y el saqueo de las tropas napoleónicas. Construyó una iglesia y a continuación la capilla familiar diseñada como como una rotonda con una enorme bóveda cruzada. La decoración pétrea se atribuye a Esteban Jamete. De la capilla quedó en pie sobre todo el lateral del Evangelio con un retablo en piedra y los arcos de sustentación del presbiterio decorados con casetones también tallados.

Lateral del Evangelio de la Capi3de los Benavides, Baeza. 

En el año 1988 se pasó a realizar obras de restauración que han sido a partes casi iguales alabadas y criticadas. Puesto que no había suficientes datos para poder reconstruir la capilla se pasó a colocar grandes pilares de cemento (en sustitución de las columnas corintias originales) que sustentaban unos arcos de acero para que la gente se hiciera una idea de cómo debía de ser y su grandiosidad.

Restauración de la Capilla de los Benavides, Baeza. 

Personalmente creo que fue una genialidad hacer así la restauración puesto que puede verse lo que queda e imaginarse cómo debió de ser sin romper el original. Sin embargo al no techarse los restos quedan a la intemperie y se están poco a poco estropeando.

Planos de cómo era originalmente la Capilla de los Benavides. 

Fotografías del autor.